Pocas son las personas que cuando son jóvenes piensan en la jubilación, y es de lo más normal.
Hablar de jubilación es hablar del final de una vida laboral y es por ello que nadie siendo joven piensa en el final de la vida laboral.
Pero ¿qué representa la jubilación para la mayoría de personas que superan los cincuenta años?
En este post intentaré explicar qué es, para muchas personas, llegar a la edad de poderse jubilar.
Pues bien, más allá de poder sentirse recompensado, después de una larga vida laboral, para muchos es algo extraño y difícil de digerir.
Para aquellos que han sido trabajadores autónomos, el hecho de terminar una etapa de desarrollo personal, creativo y de constante alerta, hace que la jubilación sea un momento realmente difícil para ellos.
Pocos son los que tienen previsto qué hacer durante el día a día, una vez finalizada su etapa laboral, y es cuando aparecen un montón de alteraciones en la salud coincidiendo con el final del período de trabajo.
Aquellos que han trabajado para otros, tienen un factor a su favor, la mayoría de ellos ve la jubilación como una liberación y desean que llegue este momento, para poder tener tiempo para realizar mil y una ideas que antes no podían desarrollar.
Pero ¿cuál es la realidad?, al cabo de un tiempo en el que se ha jubilado una persona, en la mayoría de los casos, sus vidas se vuelven monótonas y cansinas empiezan a aparecer sintomatologías de depresión y aburrimiento y por supuesto, dolores y problemas de salud que pocos años atrás, ni siquiera sabían que existían.
¿Cuál es la razón de este desfallecimiento general tras la jubilación?
En primer lugar, el hecho que cada vez la edad de jubilación sea más tardía, hace que las personas se resientan de su salud.
En segundo lugar, no tenemos cultura para saber tomar el rumbo a nuestra nueva vida. Toda la vida hemos sido adoctrinados para ser laboralmente productivos, y es por ello que a los pocos meses de no tener una obligación diaria que nos ocupe ocho horas, hace que comencemos a divagar de un lado para otro sin saber qué hacer.
En algunos casos las personas empiezan a coger rutinas sedentarias que no hacen otra cosa que empeorar su salud.
Estos son algunos de los porqués, pero ¿qué podemos hacer si nos encontramos en esta situación y queremos que nuestra vida siga siendo plena?
Aquí os voy a dar unas cuantas recomendaciones, pero pensad que siempre debéis hacer un trabajo de adaptación, sí adaptación, os puede parecer extraño, pero…
Necesitamos cambiar el chip
Recomendaciones para hacer en el día a día:
- Pensad que estáis de vacaciones.
- Pensad que cada día es una nueva aventura.
- Poned a prueba esta nueva forma de cogerse el día a día.
- Variad vuestros quehaceres diarios cambiando rutinas.
- Probad a conocer nuevas cosas.
- Evitad en lo posible entornos de personas mayores.
- Aprended nuevos hobbies.
- Salid cada día de vuestra casa, aunque sea para dar un simple paseo.
Algunas de las recomendaciones os pueden parecer absurdas, pero realmente debemos empezar con esta adaptación. Después veréis que poco a poco vuestros días vuelven a ser plenos y que el recuerdo de vuesta etapa laboral, poco a poco, solo será una reminiscencia que recordaréis con orgullo, pero sin nostalgia.
Ventajas y desventajas de jubilarse
Como he dicho anteriormente nacemos y somos educados para poder aportar a la sociedad todo aquello que nuestra capacidad pueda ofrecer. Es por ello que cuando desaparecen las obligaciones que durante treinta, cuarenta, o cincuenta años hemos realizado diariamente nos aparece un vacío.
Además, se añade otro gran problema, ya no nos sentimos jóvenes. Los retos diarios son cada vez montañas más difíciles de escalar y todo nuestro entorno ha envejecido junto a nosotros. Es por eso que debemos seguir los pasos antes citados, buscar nuevos entornos con gente de diversas edades y sobre todo ser conscientes que nuestra nueva etapa es para disfrutarla.
Sé que muchos de vosotros pensaréis que es muy fácil hacer estas recomendaciones pero que cada persona tiene una realidad distinta y compleja en su casa.
Pero que importa que seáis mas mayores, que importa si tenéis que ayudar a vuestros hijos con vuestros nietos, que importa si las piernas empiezan a flaquear, o nos cansamos mucho más que antes, lo único que tenemos que hacer es disfrutar de todo ello.
Tengo amigos que tienen cuarenta años y sus vidas son aburridas, monótonas y por supuesto repetitivas.
Pero también tengo amigos que tienen más de setenta años y en su día a día viven un torbellino de emociones. Claro que también les pasa factura la edad, pero ellos se resisten a bajar los brazos, tienen diversos hobbies que durante su vida laboral, no podían realizar y los grupos de personas con que se relacionan no son solo de personas jubiladas, sino de todas las edades.
Propuestas para realizar en la jubilación:
Todas estas cosas y muchísimas más se pueden hacer y no por ello debemos ser ricos, ni mayores.
Lo único que debemos tener es ilusión para poder afrontar esta nueva etapa de nuestra vida que es la jubilación, deseando disfrutar de nuestro día a día, porque realmente vale la pena.
Sé que algunos pensaréis que es fácil hacer cosas si la paga lo permite, pero seamos serios la paga nunca estará acorde al nivel de vida. Cada vez se alarga la edad de jubilación y para todos aquellos que a día de hoy esten cerca de los cincuenta, más vale que empiecen a buscar alternativas, ya que para cuando tengan la edad de recibir la prestación de la jubilación, después de haber pagado para ello, seguro que no existirá tal prestación y lo más probable es que la edad de jubilación sea ya a los ochenta y cinco años.
No es que sea pesimista, creo que soy totalmente realista. Si no existe un cambio radical, los sueldos cada vez serán menores y las prestaciones se eliminarán por completo. Aunque deberemos seguir pagando igual o seguramente mucho más. Como decía en un principio, estamos adoctrinados para ser laboralmente productivos. Una vez empieza la jubilación tenemos que aprender a adaptarnos poco a poco a esta nueva situación haciendo un pequeño esfuerzo diariamente.